Alberto Bravo
La Razón, 16/07/2023
Pocos músicos han tocado con tantas bandas diferentes, señal de su inquietud artística y, por supuesto, de su carácter evasivo y excéntrico
Neil Young es una de las grandes leyendas vivas del rock and roll gracias entre otras cosas a su carácter indomable y su voluntad de explorar nuevos retos y sonidos, la mayoría de las veces con éxito, pero otras por puro capricho y excentricidad. Pocos músicos pueden presumir de haber tocado con tantas bandas diferentes, algo que él siempre entendió desde una sola perspectiva: hacer lo que te apetece y sientes en cada momento. Aquí repasamos las bandas más importantes con las que ha tocado durante toda su carrera, unas efímeras y otras más duraderas, y la difícil relación con algunas de ellas.
Buffalo Springfield
El canadiense conoció a Stephen Stills y en 1965 se unió a un grupo seminal del folk-rock, su primera banda verdaderamente profesional y que dejaría una amplia huella. Excelentes canciones («For what it’s worth», «Mr. Soul», «Out of my mind») e interpretaciones acompañaron su éxito comercial. Y fue la primera muestra de la alergia que le suele producir el éxito a Young. Algo se dispara en su interior cuando vende discos y se ve impulsado a escapar hacia otro sitio. Arrestos por drogas y las ganas de Young por salir corriendo hicieron que la banda solamente durara dos años. En 1997, Buffalo Springfield ingresó en el Salón de la Fama del Rock and Roll en una ceremonia a la que Young no acudió.
Crazy Horse
En 1969, Young se sintió fascinado por el sonido de un grupo llamado The Rockets y los transformó en Crazy Horse para grabar el impresionante disco «Everybody Knows This Is Nowhere». Colegas como David Crosby o Bob Dylan le preguntaron que qué hacía con una gente que tocaba «tan mal» y Young indefectiblemente siempre ofreció el mismo argumento: «Nadie es capaz de sacar un sonido así». Efectivamente, el «sonido Crazy Horse» es historia de la música, una especie de química sobrenatural que ha dado, además del de su debut, álbumes tan históricos como «Zuma», «Rust never sleeps» o la obra maestra que sigue siendo «Ragged Glory». La electricidad convertida en obra de arte.
CSN&Y
Poco después de salir el chirriante debut con Crazy Horse, Young decidió pasarse al lado contrario en un movimiento ampliamente contradictorio y polémico. Así, se unió a Crosby, Stills y Nash para formar todo un supergrupo capaz de llenar estadios haciendo música «hippy». Pocos entendieron ese movimiento de Young, empezando por el propio Nash, quien le detestaba y seguiría detestando en lo personal. Grabaron «Déjà Vu». El mayor interés de Young estaba en su particular química con Stills tocando la guitarra, pero chocó en muchas ocasiones con él por el liderazgo del grupo. Y sin decir nada, dejó colgados a sus compañeros para hacer otras cosas.
Stray Gators
Young viajó a Nashville para participar en el programa de televisión de Johnny Cash, un tipo que siempre fue abierto a las nuevas generaciones, y allí conoció a una banda llamada Stray Gators, un impresionante grupo formado por Jack Nitzsche al piano, Ben Keith al pedal steel, Tim Drummond al bajo y Kenny Buttrey a la batería. Los reclutó con el fin de grabar el legendario «Harvest» en 1972 en unas sesiones durísimas en las que Young tuvo que tocar sentado y con un pañal al sufrir desórdenes neurológicos. Eso no impidió registrar un disco memorable que se beneficia especialmente de esa forma tan mágica y austera de tocar por parte de una banda maravillosa y extraordinariamente cálida.
The Santa Monica Flyers
Nils Lofgren, Ben Keith y Crazy Horse fueron rebautizados en el año 1973 como The Santa Monica Flyers para crear uno de los discos más angustiosos, deprimentes y memorables de la carrera de Neil Young. Fue «Tonight’s the Night», dedicado al ex Crazy Horse Danny Whitten y al roadie Barry Bruce, muertos por sobredosis de heroína. Un álbum sombrío que cuenta con una instrumentación opresiva y una atmósfera única. Reprise Records retrasó la publicación del disco dos años porque no le veía salida comercial a un álbum semejante.
The Stills-Young Band
En 1975 se volvió a encontrar con Stephen Stills para formar una banda efímera y grabar otro disco efímero, «Long may you run». No hubo química y Young se desinteresó pronto de un proyecto que pareció dos álbumes cortos: uno de Stills y otro de Young. Eso sí, para la historia quedó el sensacional tema de Young que dio título al disco.
The Ducks
En la primavera de 1977, Young se ofreció para tocar como guitarra de acompañamiento en la formación The Ducks. Dieron 22 conciertos en el área de Santa Monica, California, con Young asumiendo el papel de un integrante más de un grupo que se anunciaba en la víspera para tocar en bares. Hacer música por placer. Se acaba de publicar un disco doble extraído de las cálidas actuaciones de la banda como parte del proyecto Neil Young Archives y titulado «High Flyin».
The International Harvesters
En un nuevo giro de timón, y para disgusto de la discográfica Geffen, Young decidió montar una banda de country & western para grabar el álbum «Old Ways», un rotundo fracaso comercial. Eso sí, hay testimonio de un fantástico concierto en directo llamado «A Treasure», de los archivos de Young. Fue una reunión tan transitoria como se suponía.
The Shocking Pinks
Entre los álbumes más «controvertidos» que hizo para Geffen está «Everybody’s Rockin’», un disco de rockabilly puro y duro grabado junto a una banda bautizada como The Shocking Pinks. Realmente, el álbum hay que entenderlo como un homenaje del canadiense a las canciones que le hicieron enamorarse de la música cuando era niño. Porque, como ocurrió con tantos compañeros de generación, su primer ídolo fue Elvis.
The Bluenotes
Geffen echó a Young al considerar poco menos que le estaba tomando el pelo con sus discos. Tras firmar un nuevo contrato con Reprise Records, decidió grabar en 1988 el álbum de blues y soul «This note’s for you» junto a The Bluenotes. Otra rareza. Eso sí, tuvo un gran éxito, sorprendente, con la canción que dio título al disco, una ácida crítica a la MTV y a los artistas que se «venden» a patrocinadores.
Pearl Jam
Young fue considerado el «padrino del grunge» y en 1995 se produciría su alianza con la popular banda Pearl Jam para grabar el estupendo álbum «Mirror Ball», que además dio origen a una pequeña gira por Europa en la que el grupo de Seattle disfrutó a lo grande tocando con uno de sus maestros.
Booker T. & MGs
El grupo de Otis Redding, y también con una espléndida carrera en solitario, fue la banda base en un concierto de homenaje a Bob Dylan en 1992 en el que también tocó Young un par de canciones. Le encantó tanto la experiencia que los reclutó para realizar casi inmediatamente una estupenda gira por Europa. Volvería a contar con ellos para la grabación de «Are you passionate?» de 2001.
The Promise of the Real
Siempre dispuesto a probar su música con chicos más jóvenes, Young grabó en 2015 el disco «Monsanto Years» junto a los fantásticos The Promise of the Real, liderados por Lukas Nelson, hijo del gran Willie. Buen disco y buena gira con ellos, explotando especialmente la versión eléctrica.